SOSTENER

SOSTENER

Para las que pudisteis ir a mi primer Mujer Bonita, seguro que recordáis a Maribel. Mujer Bonita donde las haya, ella forma parte de mi vida desde hace tres añicos. Primero fue mi profesora (nunca ha dejado de serlo), después fue mi psicóloga (tampoco ha dejado de serlo), ahora es mi amiga (espero que nunca deje de serlo). Tengo en ella una tríada que es algo vital para mí. Y de tantas y tantas cosas que aprendo con ella en el camino de la vida, especialmente ahora hay una que me resuena mucho en estos días. Ella me enseñó a utilizar muy a menudo la palabra SOSTENER.

Según el diccionario, en su primera acepción reza: ‘Tener encima o sujeta una cosa de manera que no se caiga o tambalee’.

Nos pasamos todo el día sosteniendo cosas, en cada cosa, sostenemos… Las llaves, la sartén, un libro, lo que sea. Cada vez que tenemos algo en nuestra mano, lo estamos sosteniendo para que no se caiga al suelo. Ejemplo muy gráfico: cuando cogemos el móvil, lo sostenemos, pero además de forma muy consciente, porque cuando un móvil se cae al suelo… Ay diosito lindo!!!! Pueden pasar tantas cosas horribles…

Pues mi adorada Maribel me enseñó que no sólo se pueden sostener cosas. También se puede SOSTENER a personas. Si. Es bonito eso. Tener a alguien a tu lado que te sostenga, sobre todo en los peores momentos. En los mejores ya nos sostenemos solos. Cuando estamos bien, en paz, en equilibrio, no necesitamos mucho sostén. Pero cuando no estamos pasando una etapa buena en nuestra vida, da mucho gustico tener a alguien cerca que te sostenga, para que, como dice el diccionario, no te caigas o te tambalees.

También es bien que tu sostengas a alguien. Si, he dicho es bien, no he dicho está bien. Porque no es lo mismo SER que ESTAR. Es bien estar dispuesto a sostener. Bajo mi papel de madre, ahí no hay duda, a los hijos se les sostiene, pero sin ahogar. Viene intrínseco en nuestra naturaleza, ni siquiera te lo cuestionas.

Pero más bonito es, porque lo haces por elección , sostener a alguna persona que tienes a tu lado, ya sea pareja, familia, amigo, vecino, el del quinto, quién sea. Es bien darse cuenta que te necesita y sostener en sus peores momentos. Es bien, muy bien.

Y dicho todo esto, a ti que me lees, que bonito es SOSTENER!!!! pero sin ahogar. Gracias a mi Maestra/Psicóloga/Amiga Maribel del alma mía.

Prometo escribir más a menudo… Quizá los lunes, por si no te gustan. Y si te gusta lo que escribo, eso también es sostener. TE SOSTENGO.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *